Por suerte, el número de followers no siempre se traduce en votos. De hecho, contar con un gran volumen de followers en Instagram, sólo es el reflejo de una nueva propuesta para un político (o un partido). Por lo tanto, actual y digital; o que viene de un aumento de popularidad. Claro está, no hay que restarle mérito a la faena de los equipos de comunicación; que se benefician de las ventajas de la red social más de moda.
Es más, Instagram se ha alzado como plataforma para crear vínculos entre los políticos y sus votantes. Un canal clave para humanizar a través de imágenes. Por ejemplo, con imágenes de momentos íntimos y familiares; o donde se muestra el “backstage” del mundo de la política.
El caso es que el objetivo de este artículo es convertir a los followers en votos. Por lo tanto, sólo es un juego de cara a las elecciones del 28 de abril. A pesar de ello, podría ser igual de válido o incluso más que la de algunas encuestas. Y el resultado nos dice que el próximo presidente del gobierno sería:
1º. Santiago Abascal: 205.075 followers
2º. Albert Rivera: 167.455 seguidores
3º. Pablo Iglesias: 128.334 seguidores
4º. Pedro Sánchez: 116.340 seguidores
5º. Pablo Casado: 107.510 seguidores
6º. Gabriel Rufián: 105.998 seguidores
7º. Albano Dante Fachin: 28.885 seguidores
8º. Laura Borràs: 1.073 seguidores